INCIPIENTE INVESTIGACIÓN CIENTÍFICO TECNOLÓGICA EN LAS UNIVERSIDADES: relaciones de dependencia entre naciones
Por: Claudia Tamariz García
Este segundo artículo de la serie: Incipiente investigación científica y tecnológica en las universidades, analiza la problemática desde la perspectiva de la influencia de las relaciones de dependencia entre las naciones.
LA CIENCIA TECNOLOGÍA EN LAS RELACIONES DE DEPENDENCIA ENTRE NACIONES:
Hasta aquí hemos tratado de dejar claro como en las sociedades modernas ciencia y tecnología juegan un papel fundamental, íntimamente ligadas a la estructura productiva, al esquema ideológico de la sociedad y, por tanto, a su sistema educativo, con la finalidad de que comprendamos el funcionamiento de ciencia y tecnología (C-T) en nuestro país, particularmente en las instituciones de Educación Superior.
Sin embargo, para lograr un acercamiento mayor hace falta internarse en la problemática de las relaciones de dependencia entre naciones –en particular la dependencia C-T que existen en el mundo, considerando que, como lo marcamos en la introducción este es el punto nodal que explica la naturaleza del quehacer científico en México.
DEPENDENCIA ECONÓMICA
En la actualidad, la totalidad de los sistemas sociales del planeta se encuentran interrelacionados, principalmente por lazos de tipo económico, de los que se desprenden relaciones de otro tipo, pero siempre condicionadas por las económicas.
Así, existe una división en el mundo entre países desarrollados y subdesarrollados, con base en una relación de dominación económica, pero también ideológica, cultural y de otros tipos, de los primeros sobre los segundos.
Estas relaciones empezaron tiempo atrás. A partir de la necesidad de internacionalizar el sistema capitalista en el último cuarto del siglo XIX.
Para este momento, el sistema iniciado en el Renacimiento había alcanzado un enorme desarrollo gracias a la Revolución Industrial y estaba listo para entrar a un nuevo período de desarrollo, caracterizado por la concentración económica que sustituye a la fase competitiva, donde los factores de los que dependía la ganancia, eran el incremento de la producción con mejoras técnicas y la baja de precios.
En cambio, esta nueva etapa monopólica, se basa en el control de precios y mercados por parte de los productores, ya sea que una sola empresa concentre la producción total, o que varias de ellas se unan para la producción, se repartan mercados o acuerden el monto del precio y la cantidad de la producción, para aumentar sus ganancias.
Este, fenómeno, el monopolio, al parecer contrario a los principios mismos del sistema, que se define por la libre competencia, conlleva otro fenómeno que inicia las relaciones desiguales entre naciones: la expansión imperialista. Sus causas:
La necesidad de encontrar compradores para los excedentes de la producción interna. Fenómeno que se presentó desde los inicios de la producción industrial.
Las innovaciones tecnológicas, que conllevaron la necesidad de abastecimiento de materias primas estratégicas: petróleo, cobre, estaño, etcétera
La necesidad de los grandes empresarios de exportar sus capitales, puesto que no pueden reinvertir las ganancias en sus industrias, para no aumentar la producción y romper los acuerdos que mantienen la demanda y los precios altos.
Esta exportación de capitales, se realiza bajo dos modalidades:
invirtiéndolos en empresas capitalistas creadas en otros países. Empresas que pueden ser industriales, comerciales o bancarias, construcción de obras, instalación de servicios y extracción de materias primas.
Presentándolo a los gobiernos, empresas o bancos extranjeros.
De esta forma, el capitalismo... “comienza a extenderse por el mundo entero, por la vía de exportación de capitales que permite establecer empresas capitalistas en países y en sectores donde todavía no habían penetrado los monopolios” (Mandel, 1981:67)
Y Eli de Gortari opina: “En realidad, la exportación de capitales acelera el desenvolvimiento capitalista de los países atrasados, pero únicamente en aquellas ramas que les convienen unilateralmente a los imperialistas.” (Gortari, 1980:43)
Conforme el mundo se repartía econonómicamente entre las potencias mundiales, se establecía también el sometimiento de unas naciones a otras, sometimiento que entonces adquirió distintos grados, por lo que unos países adquirieron la condición de colonias, otros de semicolonias y otros más de naciones dependientes. Posteriormente muchos de los primeros se independizarían, pero desde entonces todos adquirieron su carácter de países subdesarrollados.
Este carácter subdesarrollado de las naciones que ingresaron tarde al sistema capitalista determinó una dependencia económica y de otros tipos de estas naciones hacia las más fuerte, dependencia que ha tenido una evolución propia, y que en la actualidad sigue siendo la característica más sobresaliente de las relaciones entre países en el mundo.
Antes de entrar al estudio del papel de ciencia y tecnología en las relaciones de dependencia entre naciones, nos parece importante hacer un breve análisis de la forma en que se lleva a cabo la labor científica en las naciones ricas, para establecer posteriormente la diferencia con las subdesarrolladas.
LA LABOR CIENTÍFICO-TECNOLÓGICA EN LOS PAÍSES DESARROLLADOS. EL PAPEL DE LAS UNIVERSIDADES.
En los países desarrollados en la actualidad es evidente la influencia mutua entre la estructura social, por un lado y la ciencia y la tecnología por otro, así:
“Las leyes de la acumulación de capital han orientado los intereses de la investigación científica. A su vez, la tecnología ha afectado la organización económica y social en tanto va creando hábitos de consumo, formas de trabajo y modelos de vida en la sociedad” (Leff, 1977:101)
Sin embargo, en esta relación, la influencia del sistema social, sobre todo de la estructura económica y de los intereses políticos, es mucho más determinante sobre el desarrollo de la ciencia y la tecnología, que al contrario. Francisco ]R. Sagasti nos dice al respecto:
“En el reconocimiento de un mutuo juego de influencias entre el desarrollo de las fuerzas productivas y el de la ciencia y la tecnología, se debe, sin embargo, conceder un papel dominante a las primeras.” (Sagasti, 1981:7)
En el siglo XX, desde que ciencia y tecnología se alían a la industria a partir de la Segunda Guerra Mundial, y en particular a raíz del desarrollo interrumpido de tecnología militar, debido a la carrera armamentista, aplicable a la industria civil, ciencia y tecnología se han ido convirtiendo, más que nunca, en herramientas de control del medio, de producción de bienes y servicios para el grupo humano y de dominio económico sobre otros grupos y naciones.
Ciencia y tecnología se han ido, pues, instrumentando para servir a los intereses, no sólo de la sociedad en su conjunto, sino de particulares. Y como instrumentos que son, se ha facilitado su manipulación al institucionalizar la labor científica, de tal forma que resulta menos autónoma que nunca, pues sus esquemas conceptuales se encuentran impregnados por la ideología dominante y la elección de sus temas de investigación son en gran parte determinados por las necesidades prácticas de quien la financia.
Así, la mayor parte de la investigación científica en los países industrializados, está dirigida a resolver los problemas y alcanzar los objetivos de los grandes monopolios económicos, que mantienen laboratorios de investigación en su seno, y de los gobiernos de estos países, que impulsan tecnología bélica para la protección del sistema, financian a los institutos de educación superior y elaboran políticas científico tecnológicas para cubrir las necesidades económicas, políticas y sociales de su comunidad. De esta forma, la comunidad científica, tiempo atrás aislada y trabajando en un ambiente hostil, hoy se convierte en un colaborador indispensable en el desarrollo de las naciones ricas, gracias a que éstas han cobrado conciencia del papel de ciencia y tecnología en el progreso material y en el dominio político del mundo.
“Ciencia y tecnología se industrializan y militarizan con el apoyo directo e indirecto de gobiernos y empresarios. Ya no se trata de un quehacer accidental, oculto en centros académicos y supeditado a fluctuaciones caprichosas del financiamiento público, sino que los científicos trabajan para las industrias civiles y militares y estas se inclinan a levantar laboratorios propios cuando materializan una apreciable escala de producción e integración económica” (Odara, 1976:8)
De ahí que en la actualidad la investigación en estos países se divida esencialmente en :
Investigación fundamental, teórica o pura;
Aplicada;
De desarrollo
(Algunos autores agregan otras divisiones: investigación teórica orientada, tecnología fundamental, etcétera, que quedan integradas a estas tres o como un espectro de posibilidades entre éstas.)
La investigación teórica o fundamental es la que se realiza para tener conocimientos sobre el mundo que nos rodea. Según Enrique Leff: “...Es la actividad que permite la construcción de estructuras conceptuales que hacen posible la comprensión científica del mundo.” (Leff, op.cit.:138)
Es el extremo de investigación desprovista de un “fin utilitario”. Este tipo de investigación necesita más libertad de acción que loa investigación aplicada, debe ser creativa e inventiva, aunque no es totalmente libre, pues se liga a las posibilidades dela investigación y a los requerimientos de quien la financia.
En la mayor parte de las naciones desarrolladas, esta investigación se realiza en las universidades, integrándose al sistema educativo para formar a los graduados como auténticos investigadores. El hecho de que este tipo de investigación requiera de mayor de libertad de acción y que no esté tan íntimamente relacionada con requerimientos económicos, hace que ésta no se lleve a cabo en laboratorios industriales y que rara vez sea financiada por empresas. En cambio, son los institutos de enseñanza superior los encargados de realizarla y la mayor parte de su financiamiento corre a cargo del estado.
Dado que su fin es generar nuevos conocimientos y enriquecer el patrimonio universal del saber y que su desarrollo no depende de una planeación temática sino, muchas veces de la casualidad o de la habilidad del investigador para identificar problemas y buscarles solución ( la lógica del paradigma epistémico del momento), este tipo de investigación debe desarrollarse en foros donde la creatividad del científico y la calidad de su trabajo sean respetados y fomentados y donde sus descubrimientos sean discutidos en un foro abierto y libre. Este espacio ideal lo proporcionan loas instituciones de educación superior.
La Investigación Aplicada es aquella que se realiza para contribuir de forma directa e indirecta en la solución de un problema práctica, por tanto es estrictamente dirigida y requiere planeación, pues está condicionada por objetivos económicos.
La ciencia aplicada estudia, por una parte, las posibilidades de convertir la materia y los organismos en bienes de capital y de consumo. Se encarga de investigar los factores que afectan las propiedades de la materia y los comportamientos orgánicos de los seres vivos para, en un momento dado, modificar el medio ambiente con fines prácticos. Por otro lado, investiga cuáles son los procesos y métodos tecnológicos más adecuados para esta transformación. Así, determina, tanto el potencial productivo de los recursos naturales, como su transformación en bienes de consumo o de capital, la creación de procesos tecnológicos y métodos productivos. De esta forma: “El producto final de la investigación aplicada es el invento definido como el establecimiento o postulación de la factibilidad técnica de un proceso nuevo o mejor” (Herrera, 1981:139)
Tanto este tipo de investigación, como la de Desarrollo son en parte financiadas por el Estado, sobre todo en ciertas áreas básicas para la industria militar (aeronáutica, eléctrica, telecomunicaciones, etc.), pero se realizan sobre todo en laboratorios puestos por las empresas, que se dedican a proyectos de investigación dirigidos a la invención e innovación de un producto o de un proceso de producción que dé beneficios comerciales a corto plazo, y que protegen con patentes.
Entre la investigación fundamental y la aplicada se establece un intercambio continuo, pues la investigación dirigida busca aplicar los resultados obtenidos por la teórica para el impulso económico, y en muchas ocasiones los descubrimientos de la investigación aplicada resuelven problemas en el campo teórico o le marcan nuevos derroteros para dirigir hacia ellos las investigaciones. Esta estrecha alianza convierte incluso a la ciencia teórica en instrumento de desarrollo económico y la dirige |