POEMA

Poema Gaucho
Por: Jezabel Casella

A los amigos mexicanos el día de la independencia.

Aquí estoy porque he venido
Porque he venido aquí estoy
Después de decir lo mío
Como he venido me voy

Ahora si me permiten
Saludo a la concurrencia
Y me uno a este convite
Con gusto y con complacencia

Les pido mucha atención
Y guarden la compostura
Porque tienen adelante
La maestra ´e literatura

He venido pa traer
Haches y puntos por ciento
Y más comillas y acentos
Que maíz tiene un granero

Soy la maestra Jezabel
Y vengo de la Argentina
Si más quieren conocer:
Soy de cepa Mendocina

Ustedes querrán saber
Cómo vine hasta acá arriba
Sólo puedo responder
Son las cosas de la vida

El hombre nació pa´andar
Y pa´ recorrer caminos
Y tendrá que andar rodando
Hasta encontrar su destino

No sé si yo encontré el mío
Pero sí les sé decir
Que des que ando por aquí
Me he topado con amigos

Gente de buen corazón
Dispuesta a darte una mano
Me siento en este país
Con entre puros hermanos

Por eso me quise unir
A gritar la independencia
Con honor y con orgullo
Desde mi nueva querencia

¡Viva el grito de Dolores!
Que vivan los mexicanos
Gente valiente y brava
Igual que el chile poblano

Y aquí estoy porque he venido
Porque he venido aquí estoy
Y como dije lo mío
Cómo he venido me voy

Lucha de Evocaciones
Por: Ángel Armando Martínez

Gritan las campanas en la
iglesia
colgadas mecen sus
metálicos cuerpos.
¡Mexicano despierta, que
hoy empieza
la lucha de libertad por el pueblo!

¡Levanta tu voz, eleva tu
mano!
La patria sufre perverso
ultraje,

que no se puede vivir más esclavo,
las armas te llaman, ¡levántate!

Con negra sotana brota un
padre,
de nevada y calva
cabellera,
ciñendo a sus palmas por
estandarte
de tricolor disfraz virgen
morena.

¡Hermanos de tierra,
sangre y penas
vuestros hijos merecen
mejor nación!
Cortad hoy las férreas
Cadenas
que nos atan al maldito
español.

¡Tomad fusiles, machetes
y palos,
pelead sin miedo, la gloria
espera!
Que nos protege su manto
sagrado
y sus ojos justicia llorando
ruegan.

Y batallaron los años
consigo,
muriendo el mutismo y los
sueños,
uno a uno cayeron los
caudillos
entre ellos curas, Hidalgo
y Morelos.

Mariano Jiménez, Ignacio
Allende,
Aldama, Matamoros y
Guerrero
ganaron su vida, perdieron
la muerte
dirigiendo a ejércitos
enteros.

Once primaveras con sus
veranos
sangriento vieron fenecer
el tiempo,
indígenas gotas guerreras a
palmos
revistiendo las calles con
sus cuerpos.

Vencieron al depredador,
las presas
con su esperanza bordada
de sueño
comandados por tricolor
bandera,
que galopó incesante
contra el fuego.

Las armas mexicas de
gloria vistieron,
española carne nutrió la
corteza,
a la libertad su amante
hicieron,
México respiraba
independencia.

Casi dos centenarios han
corrido
desde aquel día quince de
septiembre
en que Hidalgo repetía a
gritos:
¡Despierten mexicanos,
despierten!

En vivas evoquemos al
pensamiento
aquellos nombres que
patria brindaron..
¡Viva Allende, Morelos y
Guerrero,
Aldama, Matamoros, viva


Hidalgo!

¡Viva Josefa, la
corregidora,
El “tata” Gildo Galeana y
Mina!
Todos insurgentes y
compatriotas,
por ellos, por nosotros, ¡México viva!

¡Viva México, viva México, viva México!

México
Por: Manuel L. Zapata

Hablar de México es viajar en el tiempo descubrir las carencias, personas e individuos pero sobre todo, hechos importantes sucedidos dando pie al surgimiento de una realidad palpable.

México, ¡nuestro México…! Como muchos de nosotros decimos, no sólo es un pedazo más de tierra dentro de este mundo, sino el hogar de muchas razas, etnias y grupos sociales donde el corazón humano puede sentirse.

Tierra de grandes hombres y valientes mujeres
Tierra donde el “maquesh”, escarabajo de mil colores,  simboliza el amor entre un príncipe y una princesa maya.
Firmamento claro en que se alzan majestuosas Chichen-Itza, Uxmal, Palenque y el Cerro de la silla, como mudos testigos de la grandeza de este pueblo.

Paraíso donde el ser indio, mestizo, negro, blanco o incluso rico o pobre, son solo una parte de este mosaico multicolor dentro del cual estamos inmersos.

Muchos de nosotros dejamos atrás mundos distintos, lenguas diferentes, fuertes raíces, queriendo  vivir, descubrir pero sobre todo formar parte de este colorido espacio, para aprender y aportar.

Poco a poco, paso a paso, con las caricias de esta tierra, su semilla florece en el alma, aprendemos y forjamos, olvidamos y tomamos lo que de ella nos da.

El sonido de un tam-tam, cambia hoy por el plim-plim de una marimba, o la cadencia triste de un tango por el alegre compás de un son jarocho y la suave melodía de las hojas muertas, por la algarabía de un mariachi.

El colorido es infinito, como el amor dentro del alma.

Los colores de mi vida hoy se tornan diferentes: verde; como el bosque que frente a mi se extiende.

Blanco: como la nieve de majestuoso volcán que en el horizonte se pierde, Popocatepetl se llama y cuida de la mujer dormida

Y rojo : como el color de las rosas que dieron marco a Guadalupe del Tepeyac, que como luciente estandarte portara con gallardía, Don Miguel Hidalgo y Costilla, para gritar con furia henchida.
Viva México…!     G


Jezabel Ivana Casella es Licenciada en Letras por la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires, Argentina. Catedrática en las áreas de ciencias sociales en la Universidad Arkos, donde además colabora como miembro activo del Taller Piloto sobre Transdisciplinariedad.

Ángel Armando Martínez Solís es estudiante de la Licenciatura en Ciencias de la Comunicación de la Universidad Arkos, participa activamente como ponente en las distintas mesas redondas de la institución. Desarrolla trabajo de poesía en el taller literario el tintero. Es miembro voluntario de la Unidad de Investigación Arkos.

Manuel Zapata es egresado del Conservatorio Nacional de Música y del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA), posee una Licenciatura en Ópera y Concierto. Colabora como catedrático en el área de idiomas del Centro de Estudios Universitarios Arkos, donde también dirige al Grupo Artístico Universitario.