Por: Angel Armando Martínez Solís
Sordos pasos merodean con sigilo
la empedrada alfombra de Vallarta
a varias almas las envuelve el vilo
y al miedo brazos le hacen falta.
Negras túnicas sus cuerpos esconden
la cómplice bruma los acompaña,
inmutas marchan a señales responden,
a cuestas portan filosa guadaña.
Furtivos murmullos al viento desfilan
que hoy dos de noviembre son los atracos;
son ladrones de vidas y silentes vigilan
su botín selecto, la Universidad Arkos.
La preocupación se ciñe a las fases
de directivos maestros y alumnos
se preguntan formas de hacer las pases
si los sobornos hoy son oportunos.
Arma en mano irrumpen al interior
las muertes con su voz reseca aclaman
“hemos venido por todos, es mejor
a nosotras vengan conforme les llaman”.
Bitácoras a sus palmas se adhieren
cada una poseedora de larga lista
donde se fijan los nombres que mueren,
sólo un llamado de ello los dista.
Los directivos convocan a reunión
al Círculo de Calidad Docente
a la Unidad de Investigación,
y solucionar la situación presente.
Escapan las opiniones a los labios
en pos de a su libertador defender
recurriendo a las teorías de los sabios
que justifiquen el mortal proceder.
Tras los minutos a la lucha brotan
uno cuestiona la metodología,
¿Qué objetivos tienen y afrontan,
Cómo construyen su hipótesis guía?
Con enfoque crítico otro explica
analizar el discurso expuesto
si es hegemónico, qué significa;
hallar el sentido al acto funesto. G
Ángel Armando Martínez Solís es estudiante de la Licenciatura en Ciencias de la Comunicación de la Universidad Arkos, participa activamente como ponente en las distintas mesas redondas de la institución. Desarrolla trabajo de poesía en el taller literario el tintero. Es miembro del Grupo Artístico Universitario Arkos.
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