Propuesta de Un Modelo de Excelencia Académica en el Aula para las Instituciones de Educación Superior

Mireya Marmolejo, Claudia Tamariz y Ana Cecilia Espinosa

Este trabajo se inició con la idea de establecer un modelo de calidad para el buen funcionamiento del Centro de Estudios Universitarios Arkos en el campo específico de la docencia, no obstante, creemos que puede ser retomado por cualquier institución de educación superior y por ello está escrito en forma impersonal.

 

 

Con este programa pretendemos mejorar la calidad de una función que nos atañe más de cerca: el proceso de enseñanza aprendizaje (E-A) 1 . Pues éste es, además, la pieza medular del quehacer de una universidad.

Es por ello que esta es una propuesta de un modelo para lograr la calidad al interior de las aulas, en el proceso E-A.

Pero es necesario puntualizar que la calidad no puede darse aquí sin que se haya logrado en toda la institución. Podrán existir esfuerzos aislados por parte de docentes y alumnos, pero si no existe un apoyo incondicional de autoridades, administrativos y padres de familia, así como un compromiso total de los protagonistas del proceso en una filosofía de calidad, ésta no podrá llevarse al aula.

La propuesta consta de tres secciones principales:

Introducción

  1. Marco Teórico
  2. Propuesta de un Modelo de Excelencia

En este artículo nos ocuparemos de las dos primeras, que sientan la delimitación de la propuesta, su justificación y su y su marco teórico. ¡Iniciemos!

1. Justificación

Quien ha vivido la experiencia de transitar por un aula, ya sea ocupando una butaca entre otros muchos estudiantes o en el papel central al frente de un grupo, no puede evitar sentir que, a pesar de todo el tiempo invertido, algo falló, que el resultado final no fue el esperado y que la experiencia, en a mayoría de los casos, resultó frustrante, aburrida, estresante y, en gran parte, inútil: la “educación” obtenida o impartida no cumplió con las expectativas de ninguna de las partes, pues algo faltó.

Como docentes, hemos desarrollado a lo argo de nuestra práctica una conciencia clara de las múltiples carencias del sistema educativo y, más concretamente, de los errores que comentemos en nuestros intercambios cotidianos con los alumnos en el aula. La falta de motivación, estudiantes pasivos, aprendizaje memorístico, incapacidad para resolver problemas y trasladar la teoría a la realidad y una total inconsciencia de que no están solos en el mundo y de que sus acciones afectan a otros, muchas veces en forma negativa son algunos de los efectos de ese proceso E-A, que han vivido generaciones y generaciones de individuos, al cual “le falta algo”.

Ese algo es calidad, un ingrediente que compromete a os protagonistas del proceso a poner en él todas sus capacidades y entusiasmo para convertirlo en una experiencia que enriquezca sus vidas y que los convierta en seres humanos pensantes, creativos y transformadores, capaces de dejar huella perdurable en el espacio y tiempo que les tocó vivir, capaces de trascender.

La calidad no es un concepto que está de moda, no es una receta de cocina aplicable a procesos productivos para generar productos o servicios “vendibles”, es una filosofía de vida que rige nuestro quehacer cotidiano, que hace que nuestros actos sean congruentes con nuestros valores e ideales, que impregnan cada acción de la convicción de que debe hacerse de la mejor manera posible.

La calidad nos compromete a poner todas nuestras capacidades y todo nuestro esfuerzo entusiasta y espíritu creativo en cada uno de nuestros actos, para HACERLO BIEN.

  Como compromiso de vida, la calidad no puede implantarse en ninguna empresa, y menos en una escuela, “de dientes para fuera”, debe ser vivida por todos los protagonistas como parte inherente e indivisible de la educación, porque la educación es de calidad o no es educación.

Vivir el proceso E-A bajo una filosofía de calidad, lo convierte en una experiencia que vale la pena vivir.

Es por eso que consideramos que al interior de las aulas de las Instituciones de Educación Superior (IES) y entre los protagonistas del proceso educativo, es apremiante adoptar un modelo de calidad que cumpa con las características de un nuevo paradigma de educación, exigencia que la sociedad manifiesta y confía a las universidades.

2. Un modelo de Calidad: Conceptos

Hacer una propuesta para lograr a excelencia en una institución educativa de nivel superior resulta de suyo interesante y compleja.

Habrán de identificarse los fines y los propósitos de la institución antes de proponer o poner en práctica modelo alguno. Estos propósitos marcarán las directrices a seguir y permitirán establecer los procesos a implantarse para lograr asegurar la excelencia. Ciertamente el modelo resultante habrá de responder coherentemente a estos fines.

La consecución de la excelencia se logrará a nivel institución únicamente sí, y solo sí, todas y cada una de las partes que intervienen y participan en y de ella, hacen suyo, con actitudes y acciones concretas, el reto de la calidad y la excelencia. Directivos, administrativos, docentes, alumnos y padres de familia, habrán de unir voluntades e inteligencias y participar activamente en el proyecto fungiendo como propiciadores, desarrolladores, creadores, motivadores, inspiradores, propositores, verificadores, innovadores... durante todo el proceso.

Lograr la participación activa, requiere entre otras cosas, la convicción total de cada una de as partes de que alcanzar la excelencia en la institución les llevará al logro de objetivos significativos para ellas mismas, que dignifiquen-signifiquen su actuar y proporcionen sentido y coherencia a sus vidas. También necesitarán plena conciencia de que son parte clave e importante del proyecto, es decir, deberán hacerlo suyo.

Ciertamente los involucrados demandarán conocer los beneficios que habrán de obtener y los compromisos que esto implica, una justa retribución. De otra manera difícilmente contribuirán con esta empresa, pues lo propuesto implica nuevas actitudes y las actitudes: un cambio. Cambio que si no es advertido como benéfico tendrá menores probabilidades de gestarse.

Por nuestra parte, consideramos que adoptar un proyecto de estos alcances en as instituciones educativas mexicanas es apremiante y como docentes hemos decidido comenzar por gestar este cambio en el espacio y con las personas que tenemos mayor relación e incidencia: nuestros alumnos y nuestros compañeros docentes. Por ello hemos decidido dirigir este trabajo a buscar y explorar diversas formas de alcanzar la excelencia y la calidad en el aula.

¡Lograr la sinergia entre profesores y alumnos es parte de la propuesta¡

  2.1 ¿Qué es la calidad?

Calidad para los expertos en el tema es:

•  Satisfacer plenamente las necesidades del cliente.

•  Cumplir las expectativas del cliente y algo más.

•  Despertar nuevas necesidades del cliente.

•  Lograr productos y servicios con cero defectos.

•  Hacer bien las cosas desde la primera vez.

•  Una sublime expresión humana que revela la auténtica naturaleza del hombre, cualidad que define a los líderes que trascienden su tiempo.

•  Sonreír a pesar de las adversidades

•  Dar respuesta inmediata a las solicitudes de nuestros clientes.

•  Un proceso que se da antes, durante y después de producir un bien o dar un servicio

•  No es un problema, es una solución.

•  Servir de a cuerdo a las normas establecidas.

•  La satisfacción y el orgullo de quien sirve con responsabilidad.

•  El significado que se le da al trabajo cuando quien lo realiza lo hace con dignidad

•  La adecuación de un bien o servicio

•  Cumplir con los requisitos.

Pareciera que cada cual puede dar su definición de calidad, y por lo tanto es una apreciación subjetiva. Decidir si todas estas definiciones contienen algo o toda la verdad, dependerán de nuestras propias apreciaciones, de la concordancia de nuestras ideas con las antes expuestas, de los conocimientos que tengamos sobre la materia y hasta habrá casos en que algunos requeriremos que se nos enuncie la situación particular a fin de definir calidad.

Lo cierto es que algunas personas en materia de calidad han logrado la característica de sobresalientes porque sus teorías acerca de ésta han trascendido la vida de las organizaciones e incluso de los pueblos, como el Japón. Entre ellos se encuentran el Dr. Edward Deming. Dr. J. M. Juran, Dr. Philip Crposhbu, Dr. Koaoru Ishikawa, Taguchi y Ouchi, quienes han desarrollado en sus teorías una metodología propuesta para alcanzar la calidad total y la excelencia.

Estas teorías no son restrictivas al ámbito industrial o empresarial, aunque hayan sido adoptadas con mayor frecuencia en teste tipo de organizaciones, por lo que no debemos imaginar que en la cuestión educativa significan totalmente otra cosa y que por tanto habremos de empezar de cero. De hecho, muchas ideas pueden retomarse, sólo habrán que identificar y encontrar la forma en que nos serán útiles. Con esto, no pretendemos decir que haya que limitarse a estas propuestas, o que no deban idearse y crearse nuevas estrategias, recuérdese que finalmente, las anteriores son teorías, y por tanto susceptibles de adoptarse o no, de mejorarse y de verificarse, no leyes a las en las que haya que confiar plenamente u obedecer ciegamente.

Veamos algunos ejemplos de estas teorías...

 

Algunos de los puntos en que todas convergen son:

•  Que hay que definir los objetivos de orden superior, integrando la filosofía institucional.

•  Que alcanzar la calidad representa el logro de mejoras radcales. Entendiendo éstas como la obtención de beneficios importantes para las diferentes partes interesadas.

•  Que la calidad tiene un destinatario (cliente) que hay que conocer y entender para poder satisfacer.

•  Que es necesario desarrollar una conciencia de participación y compromiso, un cambio de actitudes.

•  Que se pugna por la creación de grupos autorregulables que actúen como un solo cuerpo para cristalizar una visión con un sentido de misión y propósito.

•  Que es necesario e importante evaluar y verificar el proceso.

Es decir que:

•  La calidad es un proceso que se desarrolla como una forma de vida de las personas y de las organizaciones y se entiende de acuerdo a la forma en que individual e institucionalmente s entiende la vida y el servicio.

•  Que la calidad en a práctica se deriva de los valores individuales, profesionales y sociales de las instituciones y de sus miembros.

•  Que la calidad en el servicio es tener una intención clara de porqué hacer las cosas bien a la primera vez y esto se aplica en un compromiso personal para con uno mismo, con la organización y con los clientes. Es tener bien claras las características o especificaciones que debe cumplir el servicio que prestamos, considerando o teniendo presente las necesidades y expectativas de quien hace uso del producto de nuestro esfuerzo.

•  Que la calidad para practicarse requiere de claridad de entendimiento para comprender que lo que producimos tiene un fin social y que el servicio está destinado a satisfacer as necesidades de otras personas, requiere reunir ciertas características para adecuarse al uso del cliente, consumidor o usuario.

•  Que mejorar la calidad no requiere del uso de técnicas sofisticadas, sino de la convicción personal y organizacional para encontrar el sentido social del servicio que se presta. Entendiendo éste como un medio para el desarrollo y la dignificación de nuestra vida.

•  Que el aseguramiento de calidad son las acciones sistemáticas que se deben realizar para ir adecuando el concepto que se tiene o el que se desea lograr, de lo que es calidad en el servicio con las acciones que se realizan diariamente al atender al usuario.

•  Que el aseguramiento de la calidad es verificar técnicamente, midiendo las características reales de los recursos, productos y servicios, para compararlas con las especificaciones previamente establecidas, para poder actuar y determinar las acciones a implantar y así llegar a tener un servicio de excelencia.

Estas ideas no están de manera alguna peleadas con los propósitos que se persiguen en las instituciones educativas. Tal vez, lo que sucede es que adquieren significados específicos en cada situación, y habrá que traducirlos al lenguaje propio del ámbito de que se trate.

Los beneficios que se derivan de la calidad pueden representarse como una cadena de reacción inspirada en la filosofía del Dr. W. Edward Deming.

Una de las consecuencias de la calidad cuando ésta ha sido adoptada por las instituciones y sus miembros, es la baja de los costos en los procesos, lo de como consecuencia un producir más con menos o con los mismos recursos, que a su vez origina la competitividad y permite la permanencia en el mercado, lo que genera creación de empleos y bienestar social.

Alcanzar estos niveles o estados es deseable tanto en el quehacer educativo, como en el empresarial. Ciertamente en educación nos interesa que los jóvenes que se estén formando egresen con un perfil de calidad, que sean capaces de integrarse a la vida productiva (sin restringir la palabra a un mero funcionalismo) con éxito, que sean competentes para que aseguren su permanencia en el mercado y sean fuente generadora de bienestar social.

Otra forma de traducirlo podría ser que, para cumplir con el objetivo de ser útil a su sociedad, las instituciones educativas tendrán que adoptar una cultura de calidad, que les permita asegurar la competitividad y la permanencia, siendo la productividad y la baja en los costos de gran ayuda para la consecución del objetivo final. ¿Cuánto se invierte en un alumno durante toda su vida estudiantil ? Cantidades realmente inimaginables, sobre todo cuando las multiplicamos por todos los estudiantes, por ejemplo, de nuestro país. ¿ Y si lo invertido no reditúa ?  Esto es una verdad ineludible, un problema al que hay que ponerle solución.

Quizá sea necesario mencionar que, en las interrogantes planteadas, los conceptos de inversión y rédito implican - además del significado económico innegable - una connotación más amplia, extendida al tiempo empleado, a los beneficios y significantes obtenidos por los individuos y la sociedad en que están inmersos, de haber sido objeto de un proceso educativo.

Ya sea que estemos hablando de una corporación empresarial o de una institución educativa, el proceso de la calidad para ambos casos puede explicitarse en el esquema anterior. Aventurar un modelo de calidad y excelencia sin considerar antecedente alguno o aprovechar las bondades de lo ya producido sobre el tema sería una actitud poco adecuada. La propuesta de calidad que desarrollamos pretende hacer uso de las técnicas existentes que consideramos útiles para nuestro propósito, sin limitar, desde luego, el trabajo sólo a ellas.

  2.2 La Excelencia ¿Qué tiene que ver con la calidad ?

El Dr. Philip Crosby, en su teoría, postula que la calidad no cuesta , lo que cuesta son las cosas que no tienen calidad. Es decir todas las acciones que resultan de no hacer bien las cosas a la primera vez. Explicación con la que estamos de acuerdo, pues el no adoptar la calidad en la educación se ha traducido en una serie de problemas que nos aquejan ; el desempleo o subempleo de los egresados de las escuelas, los altos índices de reprobación y la deserción escolar son sólo algunos ejemplos.

Crosby comienza por explicar lo que no es calidad. Los supuestos erróneos acerca de ésta. Dentro de ellos, particularmente nos llama la atención el primer supuesto. “Creer que la calidad significa excelencia, lujo, brillo o peso”.

Para él calidad es cumplir con los requisitos. Es decir, que si un cadilac cumple con los requisitos de un cadilac, entonces es un automóvil de calidad. Lo interesante aquí resulta la manera en que equipara la excelencia con términos como lujo, brillo o peso.

En el supuesto mencionado, advertimos dos posibilidades en la concepción que éste tiene de la excelencia, sin pretender, por supuesto, afirmar que realmente lo sean.

La primera es la ya mencionada equiparabilidad entre excelencia y conceptos como lujo brillo o peso, que quizá adquiera algo de coherencia si nos referimos a productos. Aunque preferimos la idea de que incluso la excelencia en este ámbito tiene que ver con el grado de satisfacción que le produce al cliente aún después de haber reunido los requisitos, tal vez un valor agregado. Con esta primera concepción no estamos de acuerdo.

La segunda es que la excelencia es una consecuencia de la calidad.

Esta última posibilidad es la que nos interesa, pues parte de nuestra concepción es que la calidad es un proceso que tiene como objetivo alcanzar la excelencia.

Cuando referimos la excelencia a las personas, coincidimos en que esto significa alcanzar un estado deseable. Creemos que el hombre nace como un proyecto del ser, el cual se irá logrando a lo largo de su vida. También creemos que la educación debe ayudar a acortar y orientar este camino entre el ser y el proyecto del ser. Es decir que, de alguna manera, el hombre debe estar en una constante búsqueda del saber estar, para traducirlo en el saber hacer y alcanzar el saber ser ; o en otras palabras, el bien-estar , para el bien-hacer y alcanzar el bien-ser , estado deseado al que nos referimos . Estos niveles presentados hacen referencia a la relación del hombre consigo mismo y con su sociedad.

 

Así, el saber estar adquiere sentido para el individuo en su necesidad de adaptarse a la sociedad en la que habrá de desenvolverse, e insertarse de manera natural sin choques ni enfrentamientos. Debe adoptar la herencia que le ha sido legada por ésta, para asegurar su continuidad y permanencia como parte de un grupo. El saber hacer hace referencia a las acciones que el individuo habrá de realizar en coherencia al desarrollo y beneficio propio y al de su sociedad, aceptando los aspectos positivos que ella le ofrece, pero igualmente reconociendo sus fallos y debilidades para trabajar activamente en modificarlos. Finalmente el saber ser confiere importancia a los niveles anteriores como previos a éste, y a la necesidad de los individuos no sólo de adaptarse a la sociedad y de ser participe de sus reglas, sino de alcanzar la trascendencia mediante las obras que realiza. De contribuir a la evolución de su cultura y su sociedad.

La excelencia educativa es la posibilidad que la educación da a los individuos, para trascender su tiempo y espacio concretos, a través de una acción transformadora sobre su entorno.

La educación que, en su expresión más pura implica en sí misma a la calidad, es ese proceso inacabado y continuo en el que el ser humano transforma su realidad al mismo tiempo que se transforma. Y tal proceso compromete todos los esfuerzos y capacidades del ser humano por superarse. Es ese compromiso por hacer el mejor esfuerzo en una empresa de superación propia y de otros : la educación, a lo que llamamos calidad educativa. Es por ello que no puede haber educación sin calidad, la educación sin calidad no es educación.

El logro final de la educación será la trascendencia del ser humano, en ello consiste la excelencia educativa.

Pero la excelencia educativa también la alcanzan las instituciones educativas de calidad, y se define como un estado que les permite ejercer una actividad transformadora en la sociedad, a través de la cual alcanzan su trascendencia.

“En la historia de su sociedad sólo vive el que deja rastros en las cosas o en los espíritus. La vida vale por el uso que de ella hacemos, por las obras que realizamos. La medida social del hombre está en la duración de sus obras : la inmortalidad es el privilegio de quienes las hacen sobrevivientes a los siglos y por ellas se mide” (José Ingenieros)

2.3 Calidad en el aula.

Si no podemos referirnos a una educación sin calidad porque ya no es educación, sí podemos hablar de un proceso de enseñanza aprendizaje que dará por resultado una no educación, es decir, de un proceso E-A sin calidad. Es por ello indispensable establecer un modelo de calidad en el aula. La calidad en el aula significa un compromiso de los involucrados por poner todo su esfuerzo y capacidades en la tarea de alcanzar plenamente los objetivos de aprendizaje, como paso previo y fundamental en la consecución de los objetivos de orden superior de la educación, con el menor costo. Donde costo adquiere una connotación diferente al mero sentido económico que normalmente se le atribuye. En este caso va a implicar :

•  tiempo,

•  trámites y papeleo,

•  cuestiones de tipo cualitativo : Insatisfacción, apatía, negligencia, frustración, indiferencia, ...

•  alumnos repetidores,

•  reprobados,

•  deserciones,

•  desempleo de egresados, ...

•  Propuesta de un modelo de excelencia en el aula en las instituciones de educación superior.

Desde el punto de vista de la teoría de sistemas, las IES son sistemas abiertos que interactúan con el ambiente. Siguiendo este esquema, el aula sería un subsistema de la organización escolar. Subsistema inmerso en un medio ambiente (escolar) que le provee de una serie de insumos que se procesan al interior del aula mediante el proceso E-A, para generar resultados que regresan al medio ambiente escolar y social. Bajo esta óptica se establece una cadena proveedor-cliente cliente-proveedor.

Esto se ilustra más claramente en el siguiente esquema :

Entradas ...

Representan las aportaciones del medio ambiente escolar al aula. Entre ellas se ubican :

 

•  Currículum . Estructurado para conseguir las conductas específicas deseables en los alumnos : valores, actitudes, saberes, destrezas, competencias, adaptando los planes y programas de estudio para adaptarse a cualquier educando en base al paradigma de calidad.

•  Currículum Oculto . El cual debe apoyar la filosofía de calidad de la universidad.

•  Alumnos sensibilizados de ser co-responsables en el proceso de calidad de su educación y capacitados para poner en marcha un modelo de calidad.

•  Maestros sensibilizados y capacitados en la filosofía de calidad, estrategias, fines, etc.

•  Recursos económicos y materiales suficientes y de calidad.

•  Servicios y funciones administrativas que reflejen una consciencia del papel central de la labor docente y manifiesten un compromiso en su papel de auxiliares del proceso enseñanza - aprendizaje.

•  Conocimientos científicos actualizados.

•  Tecnologías de vanguardia para auxiliar en el proceso. (Informática, ayudas didácticas, etc.)

•  Dirección . Que ejerza, más que una autoridad, un auténtico liderazgo para una educación de calidad.

Salidas ...

Las aportaciones que este subsistema provee al medio ambiente social, pueden delimitarse en términos del perfil de egreso de los estudiantes, es decir de sus características. Con esto, nos referimos a profesionistas con una formación que incluye :

•  Adoptar la cultura de su sociedad. Su socialización.

•  Adoptar los conocimientos y habilidades que se requieren para el desempeño de un trabajo.

•  Capacidad de aplicar las teorías a la realidad.

•  Capacidad para resolver problemas, y para hacer nuevas aportaciones.

•  Desarrollados en valores

•  Individuos comprometidos con su realidad

Para garantizar la calidad de estos “productos” es necesario establecer estándares medibles para cada uno de ellos, estándares que habrán de ser fijados por los responsables de implantar la calidad.

Las características arriba mencionadas, quedan implícitas en el paradigma de calidad en el aula, que abordaremos posteriormente.

¿Qué implica establecer un modelo de calidad en el aula ?

De acuerdo con los diferentes autores antes analizados sobre las cuestiones de calidad, lograr calidad en el aula implica :

•  Identificar al cliente y conocer sus necesidades y expectativas.

•  Definir los objetivos institucionales y los objetivos de orden superior

•  Establecer el paradigma de un proceso E-A de calidad.

•  Definir quienes participan en el proceso, y en que consiste su participación.

•  Establecer las estrategias y mecanismos de planeación, desarrollo, verificación y evaluación de la calidad del proceso de enseñanza aprendizaje.

3.1 Identificando al cliente.

Para aplicar este concepto a la educación debemos identificar quienes son los consumidores de ésta, algunos consumidores o usuarios identificables son :

•  Los estudiantes que van a recibir directamente los beneficios de la educación.

•  Las familias que indirectamente reciben el impacto de la educación de uno de sus miembros.

•  Los empresarios que reciben los recursos humanos recién formados para colaborar en las organizaciones.

•  La sociedad en general de la que forma parte el educando, y que recibirá los beneficios de la acción transformadora de la educación.

3.1.1 ¿Quién es el cliente en el aula ?

Cuando trasladamos esta situación al aula, el cliente se convierte en un elemento más concretamente identificable : EL ALUMNO.

Aunque no es aconsejable olvidar que éste no es quizá el único consumidor o beneficiario.

Lo que si hay que tener bien claro es que finalmente es a este cliente directo, el alumno, a quien hay que dar prioridad y satisfacer, ya que del cubrimiento de sus necesidades y expectativas dependerá en buena medida la satisfacción de los otros tipos de consumidores, y la permanencia y justificación de las instituciones educativas en nuestra sociedad.

No hay que perder de vista que un cliente esencial a tomar en cuenta en el proceso educativo es la sociedad y que es quien finalmente impulsa a la educación como un mecanismo destinado a formar a los individuos que contribuirán a su desarrollo como sociedad. Es por ello que al enumerar las necesidades del cliente habremos de considerar las necesidades de la sociedad.

Por lo tanto en el proceso de enseñanza aprendizaje es importante crear consciencia y compromiso en el educando hacia lo que demanda la sociedad de un ser humano educado. Aquí llegamos a un punto esencial, el de crearle necesidades al individuo, mismas que habrán de serle satisfechas.

3.1.2 Necesidades en el proceso de enseñanza - aprendizaje

Se necesita que :

•  Se privilegie el aprendizaje

•  Se establezca una comunicación efectiva durante el proceso

•  Se resuelvan dudas

•  Se definan los objetivos con claridad

•  Se expliquen los contenidos

•  Haya motivación

•  Se complemente la teoría con la práctica

•  Se estimule la resolución de problemas a través de lo aprendido

•  Se exploren nuevas formas de aprender

•  Se permita la participación

•  Se propicie la creatividad

•  Se propicie el trabajo en equipo

•  Haya una adecuada combinación de Disciplina - Flexibilidad

•  Definiendo los Objetivos Institucionales

  3.2.1 La Misión

La formación integral de los educandos para difundir y preservar la cultura e integrarlos a su sociedad como individuos capaces de transformarla y hacerla evolucionar en beneficio de los seres humanos que la conforman.

  3.2.2 Valores

“La responsabilidad fundamental de una institución educativa y sus docentes es la de mostrar en su vida cotidiana los valores en los que cree para estimular el desarrollo de actitudes correspondientes. Es más importante que el alumnos descubra y aprenda una razón válida para vivir, que cualquier otra cosa.

Las actitudes son lo que dan lugar a los valores. El valor es un ideal que trasciende las situaciones, mientras que la actitud hace referencia a las situaciones concretas, es decir, atiende al objeto, tiempo, contexto y tipo de acción. La esperanza del educador es que las actividades que se desarrollen en un curso logren que los alumnos sean capaces de establecer juicios de valor consistentes, derivados de modos de pensar y valorar que les permitan hacer frente a sus decisiones vitales.

Los valores no se imponen, sólo se proponen y ejemplifican vivencialmente en la cooperación no en la competencia. Una actitud se refuerza cuando se percibe en una persona digna de respeto o cuando se dialoga críticamente en clase o fuera de ella sobre situaciones sociales cotidianas preñadas de valores.”

En toda institución de educación superior deben subyacer una serie de valores que ha de vivir y proponer con el ejemplo a sus educandos. Tales valores son inherentes a la educación y se desprenden de la misión de cualquier institución educativa. Consideramos como esenciales los siguientes :

•  La veracidad, como el propósito firme de buscar y seguir el recto camino de la verdad.

•  La dignidad, o el respeto que cada quien merece en su persona.

•  La bondad, como natural inclinación de todo individuo a la práctica del bien.

•  La libertad, como atributo supremo del hombre que le permite elegir su actuación sin sometimiento a fuerza o poder alguno.

•  La lealtad, como virtud que dirige la fidelidad hacia una causa o un ser al que se esta vinculado.

•  La paz, como ideal entre los pueblos y los hombres para alcanzar una vida armónica, tranquila y por ende, plena.

•  La justicia, como voluntad constante de otorgar a cada quien el mérito de su labor.

•  La solidaridad, como adhesión espontánea a las actividades o necesidades de los semejantes.

3.2.3 Objetivos Institucionales.

•  Difundir la cultura acorde con el momento histórico de la sociedad, con la doble finalidad de preservarla a través de su inculcación en los educandos y de adaptar a estos al medio social en el que van a desenvolverse.

•  Formar profesionales, investigadores y docentes que incrementen el patrimonio cultural del país, desarrollando los conocimientos científicos y tecnológicos, desde un sentido humanista, que requiere la sociedad para resolver los problemas que aquejan a la población y propiciar su desarrollo.

•  Formar a los educandos de manera integral, lo que incluye :

•  El desarrollo de sus facultades intelectuales, para formar seres humanos pensantes, críticos, creativos y propositivos.

•  El desarrollo de una conciencia social que incluya el respeto a los demás, un espíritu de servicio y la búsqueda del bien común.

•  El amor a la verdad y su búsqueda constante.

•  El desarrollo del bienestar físico a través de prácticas deportivas y el cuidado de la salud.

•  El desarrollo de habilidades artísticas y de un sentido estético que le permitan apreciar lo bello y poner en práctica su creatividad.

•  Estableciendo el Paradigma de Calidad en el Proceso E-A

  Para determinar qué es lo que queremos que sea exactamente un proceso E-A de calidad, que se traduzca en una verdadera educación, hace falta establecer un paradigma o modelo del proceso.

  3.3.1 Concepto de Paradigma

Joe Arthur Barker sustenta una teoría en torno a este concepto. El problema que preocupa a Barker y en base al cual desarrolla su teoría, es el de la resistencia de las personas a ideas nuevas, a explicaciones y formas de hacer las cosas de manera novedosa. Dice el autor que las nuevas ideas provocan cambios, rompen el statu quo y crean incertidumbre e inseguridad. Las personas rechazan las nuevas ideas basadas en el principio de que el futuro es una extensión del pasado y que las ideas que nos han traído hasta el presente nos llevarán al mañana.

Barker afirma que esta resistencia al cambio evita que las innovaciones sean aceptadas, ya sea en la vida cotidiana, en los negocios o dentro del ámbito científico. El autor se refiere a ideas nuevas que no son sólo mejoras a viejos métodos de hacer o pensar las cosas, sino que son cambios revolucionarios que hacen que los individuos reevalúen esos antiguos métodos, y que son, al principio, resistidas con frecuencia por la gente, incluso gente inteligente.

¿Qué es lo que impide entender y aceptar ideas nuevas?, se pregunta el autor. Y su respuesta es : los paradigmas.

El autor aclara que el significado de la palabra paradigma en un diccionario es el de patrón o modelo. Y él lo define como un conjunto de reglas y reglamentos que tienen dos funciones :

•  Establecen límites, eso es lo que hace un modelo

•  Explican cómo resolver con éxito problemas, dentro de esos límites.

Se trata de un modelo de la realidad que los individuos establecen para relacionarse con ella. Es un filtro que selecciona nuestras percepciones de la realidad y nos indica cómo enfrentarnos a ella para resolver problemas de forma adecuada.

El empleo del término paradigma es tomado por Barker de la obra de Thomas S. Kuhn, La Estructura de las Revoluciones Científicas , que explica la forma en que evoluciona la ciencia, a través de cambios en sus paradigmas .

Barker sintetiza en seis puntos su teoría en torno a los paradigmas :

•  Los paradigmas se encuentran en todos los aspectos de la vida : profesional, social, espiritual y personal.

•  Los paradigmas son útiles, pues muestran qué es importante y qué no lo es, ayudan a identificar problemas y proveen las reglas que ayudarán a resolverlos.

•  El riesgo es que a veces los paradigmas pueden convertirse en “el Paradigma”, es decir “la única manera de hacer algo”. Por tanto, una idea nueva que esté fuera del Paradigma, es rechazada de plano. Este rechazo lleva a un desorden, según el autor, que el llama Parálisis Paradigmática, y que define como “una enfermedad mental de certeza”.

•  La gente que crea nuevos paradigmas son gente de fuera : foráneos. No son miembros de la comunidad del paradigma establecido, por tanto no están comprometidos con él y no tienen nada que perder creando nuevos. En consecuencia, los nuevos paradigmas surgen en la periferia.

•  Los adeptos al viejo paradigma que eligen adoptar el nuevo en sus comienzos, y que Barker llama Pioneros del Paradigma, deben ser muy valientes y confiar en su propio juicio, pues tendrán que enfrentar el rechazo del resto de la comunidad.

•  Todo individuo puede elegir cambiar su paradigma.

El paradigma tradicional de la educación ha estado basado en un proceso que privilegia la enseñanza sobre el aprendizaje, que se basa en la memorización, en la reproducción de conocimiento, en el papel pasivo y receptor del alumno y en el autoritario rol del maestro. Un paradigma de esta naturaleza, en la actualidad, se traduce en un individuo incapaz de analizar, de prever, de proponer soluciones adecuadas a las situaciones del cambiante mundo en que vive. Respondiendo así con soluciones pasadas a situaciones nuevas.

Esto hace necesario replantear el paradigma congruente con la realidad que vive el mundo de hoy. En una época como la actual en que la única constante es el cambio, la educación no puede sustraerse a esta realidad, puesto que está inmersa en ella y justifica su existencia en tanto mecanismo social de difusión y enriquecimiento de la cultura y como formadora de los individuos que habrán de transformarla.

El cambio constante de las sociedades exige de sus integrantes un nuevo perfil, se requieren individuos capaces de resolver problemas, de aportar nuevas ideas, de realizar con eficacia y eficiencia su trabajo, de asimilar los cambios y adaptarse a ellos, de incrementar constantemente sus conocimientos y generar nuevos, en fin, de un hombre nuevo que la educación debe formar.

En otras palabras, se requiere un nuevo paradigma que entre otras cosas este comprometido con la calidad y que supere al anterior.

3.3.2 Objetivos del Paradigma de Calidad

Los objetivos del paradigma deben estar acordes con las necesidades de los clientes del sistema educativo, esto es de los padres de familia, los alumnos, las empresas contratantes y la sociedad en su conjunto.

Estos serían :

•  Eficiencia terminal

•  Logro de perfiles de egreso

•  Competitividad, traducida como la preparación de alto nivel de los egresados, manifestada en su capacidad de resolver problemas reales y en el desempeño exitoso de un trabajo e incluso en su capacidad para acceder a niveles superiores de educación.

•  Satisfacción de necesidades sociales y nacionales :

•  Mayor cultura política. Que incluye la formación de individuos habilitados para la práctica de la democracia, la justicia, el fomento a valores nacionales, etc.

•  Desarrollo económico. Que implica formar individuos preparados para alcanzar la competitividad económica en un mundo globalizado, capaces de impulsar un desarrollo tecnológico propio y lograr la estabilidad económica a través del desarrollo productivo del país.

•  Bienestar social. Se trata de inculcar en los individuos un compromiso por elevar el bienestar social de todos los habitantes de la nación.

•  Formación en valores. En donde se pretende inculcar en los individuos una serie de valores sociales que garanticen la existencia de una sociedad sana, fortalecida por los valores de sus integrantes.

  3.3.3 El Paradigma de Calidad en el proceso E-A.

El paradigma de calidad que responde a los objetivos anteriores, se traduce como :

•  Privilegiar el aprendizaje antes que la enseñanza.

•  Un proceso de mejora continua. Esto implica un compromiso de superación constante.

•  La planeación antes que la improvisación. El proceso E-A no puede ser producto de la improvisación del docente, debe haber todo un trabajo previo de planeación que establezca, de antemano, las estrategias a seguir para la consecución de los objetivos. Pero sin perder de vista la flexibilidad que nos ayuda a adecuar el proceso a circunstancias concretas.

•  Eficiencia y eficacia en el proceso. Esto es, alcanzar los objetivos de calidad con el menor número de recursos.

•  La congruencia. Tanto entre el planear y el hacer, como entre el pensar y el hacer.

•  Estimular el aprender a aprender. Como respuesta a la necesidad apremiante de asimilar y aplicar el cúmulo de conocimientos que nuestro mundo actual genera a una velocidad vertiginosa.

•  Estimular el aprender a pensar. Ello implica desarrollar la capacidad de análisis, de síntesis, de resolución de problemas, de proposición de soluciones innovadoras, de crítica, de toma de decisiones, etc. que permitan al educando prever y enfrentar situaciones reales.

•  Un aprender a enseñar y un enseñar para aprender. Porque la práctica docente es una habilidad que se aprende y se enriquece en la práctica misma de la enseñanza.

•  Generar conocimiento mediante la práctica de la investigación. Porque es de las universidades de donde surgen los nuevos conocimientos y los avances científicos que mueven al mundo.

•  Propiciar el trabajo en equipo. Porque el hombre es un ser gregario que no puede realizar ninguna actividad si no es en grupo y el trabajo en equipo se traduce en una sinergia, donde los resultados del esfuerzo de equipo son mayores que los individuales.

•  El estímulo al esfuerzo antes que el premio a los resultados. Porque un esfuerzo, por pequeño que sea debe ser estimulado, a fin de generar una superación constante en los individuos.

•  Un impulso a la creatividad.

•  La formación de una conciencia social. El producto de la educación debe ser un individuo que transforme su sociedad buscando el bienestar de todos aquellos que la integran.

•  El docente es, antes que transmisor de contenidos y monitor, un promotor del aprendizaje .

El modelo de calidad que se implante en las aulas debe pugnar por hacer realidad este paradigma, y ello implica modificar modificar la cultura interna de la institución, entendiendo cultura interna como el conjunto de atributos que distinguen la organización escolar : valores, costumbres, creencias y sentimientos compartidos por todos.

Implantar este nuevo paradigma es la tarea del modelo de calidad que estamos proponiendo, ello implica revolucionar las ideas y valores que sustentaba el viejo paradigma, cambiar la forma de hacer las cosas : comprometerse con un nuevo modelo de accionar como institución educativa.

  3.3.4 Perfil de egreso del alumno.

Con base en este paradigma, podemos establecer cuál es el perfil de un alumno que egresa de un aula de calidad:

•  Un individuo consciente de las potencialidades infinitas inscritas en su ser y comprometido con hacer uso de ellas en beneficio personal y de su sociedad.

•  Un ser que trascienda su tiempo a través de un impulso transformador que se construye en su quehacer diario.

•  Un individuo capaz de adaptarse a los cambios de su mundo y adelantarse a ellos.

•  Un ser humano pleno en valores que se manifiestan en su actuar cotidiano y en su relación con los demás.

•  Un ser humano que justifica su esencia como ser pensante.

A manera de salida

Hasta aquí hemos abordado, en nuestro próximo artículo nos ocuparemos de cuestiones como el definir quienes son los participantes del proceso educativo, cuales son sus funciones y que beneficios obtendrán en el contexto de la propuesta de calidad y excelencia que aquí se presenta. G

Tomado de “Apuntes de Calidad” Universidad Arkos.

Educar en valores, Armando Rugarcía Torres, Lupus Magister, pag. 83.

Fuente : Autoestudio 1996, Universidad del Valle de México.

1 Hacemos la aclaración de que al hablar del proceso de Enseñanza-Aprendizaje, postulamos el privilegiar el aprendizaje por sobre la enseñanza, tal como o s3ñla la corriente constructivista, a lo cual ésta llama proceso de aprendizaje.


REVISTA

NO. 5