La Psicología del Estudiante
Objetivos para el próximo semestre
J. Martín Puebla Ontiveros
Estudiante de Negocios Internacionales
Como estudiante considero que el logro de un alto rendimiento educativo representa una oportunidad de transición que nos lleva hacia mejores condiciones de salud mental y física.
No obstante, para alcanzar dicho rendimiento es condición importante establecer objetivos congruentes y materializables. En otras palabras, se requiere del trazo de metas claras que guíen la acción de aprender. Sobre este contexto presento algunas reflexiones.
Usualmente, al terminar satisfactoriamente un semestre altamente competitivo, se presenta una sensación de bienestar. Ello generalmente anima al estudiante a continuar en su propósito hasta la “recta final.”
Entre ese momento y el inicio del siguiente periodo escolar, existe un periodo de transición que deberá ser seguido por otro de reflexión.
Justamente allí es donde el estudiante (entiéndase niño, adolescente o futuro profesionista) en compañía de sus maestros y sus padres, debe evaluar el semestre anterior para determinar cuál será el rumbo a seguir en el siguiente periodo escolar.
Dentro de este contexto, el trabajar en función de objetivos preestablecidos adquiere relevancia, pues:
El hecho de que te fijes objetivos incrementa en mayor proporción la cantidad y calidad del trabajo (en más del 50%) que realizas en comparación a cuando no lo haces. Por ello, todos tus proyectos de estudio y competencia deben siempre incluir objetivos.
No obstante,
- Todos los objetivos que te fijes para el estudio deben poseer una probabilidad alta de ser alcanzados; es decir, deben estar dentro de tus posibilidades. (Es importante que sean ambiciosos, pero también realistas.)
Ahora bien,
- Cuando expresas públicamente los objetivos que te has trazado, la calidad y el volumen de trabajo que se consigue tiende también a ser mayor debido a que tal situación te obliga a actuar de manera más comprometida. Recomendamos pues que lo hagas, siempre con un afán de autosuficiencia.
Por otra parte,
- La señalización del rendimiento que deseas alcanzar mediante el establecimiento de metas factibles y congruentes en el tiempo, aumenta la posibilidad de conseguir un objetivo más lejano o de magnitud mayor. Cuando consigues metas u objetivos se produce una sensación de logro y tiendes a mantener el esfuerzo y la actitud positiva en el desarrollo de tus tareas y competencias escolares. Esto es importante para niveles educativos superiores y para periodos de estudio muy largos, que generalmente requieren del estudiante la consecución de objetivos de mayor alcance y complejidad.
Por eso,
- Cuanto más claros, factibles y significativos sean tus objetivos, mayor será tu tolerancia a la fatiga y a las distracciones. La confianza y los resultados se incrementan y son mejores cuando sabes qué alcanzar y cuál es el camino para conseguirlo. Por eso es recomendable usar una estrategia planeada y visualizada con precisión.
Por último,
- En la mayoría de las carreras de nivel profesional, donde cada calificación cuenta como un método de eliminación, y donde el grado de atención, esfuerzo y motivación requieren de una constancia extraordinaria por parte del estudiante, el reto de vencer la fatiga, la rutina o las circunstancias adversas se muestra aún mayor. De hecho, existe un momento en el que como estudiante te cuestionas la posibilidad de mantener el nivel de esfuerzo, situación a la que llamo “deseo de parar” . Este suele presentarse cuando estás en la “recta final” (los últimos dos meses para terminar el semestre -tercer parcial), Por eso es que este es un momento vital, pues la posibilidad de alcanzar el objetivo trazado, el conseguir el triunfo o fracaso está por determinarse. Este también es el momento en el que debes redoblar esfuerzos, pensar positivamente, y aferrarte a la estrategia educativa y competitiva que construiste. De aquí que sea importante que ésta haya sido claramente formulada y estudiada.
La tarea de ser estudiante es pues compleja, como también lo es su psicología. Por ello se requiere de un esfuerzo planeado y de una actitud automotivante: tu estrategia personal.
Esperando que consideres y reflexiones sobre los elementos anteriores, te invito a ponerlos en práctica. Pronto podrás ver resultados. |